sábado, 25 de febrero de 2012

Tormenta.

.¿No les encanta el sonido del viento? Ese sonido que anuncia la llegada de una tormenta enorme, que puede alimentar a muchas plantas, y ahogar a muchas hormigas. Hoy, hace unas horas, empezó a moverse la cortina de mi cuarto, hacia adelante y hacia atrás. Supe enseguida que era lo que hacía que se moviera de esa forma. Cuando fui a ver que había pasado, abrí más la persiana, me senté en la ventana, mientras que el viento acariciaba mis mejillas, acariciaba mi cabello, mi cuello, mis manos, mis brazos.. Observaba todo. Como los árboles se movían en forma circular, como las hojas caídas al suelo se desparrataban en toda la vereda, como las plantas que estaban en mi jardín delantero empezaron a oscurecer y, junto con ellas, el cielo. 
Cerré mi persiana, mi ventana, todo. No porque yo quería, sino porque tengo una mamá que es un poco maniática con algunas cosas. Pasaron las horas y yo leía, en las redes sociales, que mucha gente decía que llovía. Yo estaba con mis auriculares, y en ellos se escuchaba bien alto el sonido de mi banda favorita de rock. Decidí abrir la puerta de mi cuarto, la cual da hacia afuera -porque mi cuarto antes era un living-, y allí fue cuando supe que mi fascinación con la lluvia había expandido. Apagué mi música, y me puse a escuchar. Me encanta esa perfección imperfecta con la que cae la lluvia. Siempre derecha. Hasta que empieza a caer en forma torcida, pero después, otra vez, vuelve a caer derecha, recta ¿No les encanta escuchar el sonido de las gotas cayendo encima de la vereda, encima de la calle, de los techos, de la tierra? 
A mi me gusta ver como es que las gotas bailan en el suelo, me gusta ver como chispotean, y como brillan en plena oscuridad.
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