Coro.

No se como explicarte lo feliz que me hace ir los sábados y encontrarme con todas esas personas despelotadas y simpáticas. Quererlos, es poco. No me jode tener que decir 'uh, tengo coro, perdoname'; es más, me hace sentir orgullosa, porque de verdad me estoy tomando en serio lo que tener coro significa. Hoy me pasó algo muy loco, algo que nunca me había pasado, o puede que sí, pero nunca le había dado tanta importancia. Estábamos cantando, esos temas que nos hacen sentir vivos, que nos hacen entender que vivimos para esto, que adoramos lo que hacemos. Vale aclarar que siempre que cantamos estamos en una semi ronda, mirando a Patricia, nuestra directora. Yo me puse en una esquina, porque sino todas las chicas me desconcentraban y terminaba cantando cualquier cosa. En fin, cantando estábamos, y en eso me pongo a mirar a todos, a cada uno, y ellos me devolvían la mirada, como una especie de 'soy tu compañero, podemos estar juntos y hacer lo que querramos, te quiero, te aprecio, amamos y soñamos con lo mismo; no tengo vergüenza de cantar mientras vos me mirás, porque de verdad te tengo confianza'. Fue tan hermoso ver como me devolvían la sonrisa, ver como disfrutaban cantando, ver como nos podíamos dar cuenta de que estamos enamorados del canto. Y eso nos encanta,nos encanta tener ese sentimiento tan puro, tan maravilloso. Ojalá la gente logre comprender, logre tener ese sentimiento. Gracias canto, sin vos ahora mismo no sería nadie.