Aroma de café.

Iván, vos me dijiste que te demostrara el cuanto te quiero, el cuánto me gustás. No sé que haría sin vos en estos momentos, creo que estaría deprimida, o con bajo autoestima. Gracias a vos volvieron mis ganas de reír y de vivir. Y no, no exagero, porque cuando pasó lo de ese idiota que mejor no nombrarlo, mi vida pasó de estar en la cima, a estar pisoteada por el suelo. Te doy las gracias por hacerme sentir bien, te doy las gracias por alegrarme todos los días, y sacarme una sonrisa, te doy las gracias por hacerme sentir QUERIDA por alguien.
¿Sabés lo que me gusta de vos? Uf, ayer te lo dije todo. Me gusta cuando te ponés en sensible,  me gusta cuando me decís tantas idioteces que me terminas haciendo reír. Me gusta la clase de persona que sos, me gusta tu caracter, me gusta .. me gustan tantas cosas de vos. Todavía no logro escuchar tu voz, ya que nunca hablamos, tan solo te veía, nunca te escuchaba. Si escuchara tu voz creo que estaría completa. Ojalá que nos veamos antes de que yo me vaya, no quiero perder la oportunidad de volverte a ver, y poder hablar con vos, poder abrazarte, poder mirarte, poder escucharte, poder tirarte del pelo (?). Bueno, en fin. Lo único que te quería decir es que me gustás, y que te quiero, mucho.