Alguien.

Me gustaría estar sentada junto alguien, acostada, y poder mirar películas, poder leer juntos, ver series, hablar, disfrutar el silencio, dormir, besarlo, abrazarlo, mirarlo y sonreír. No busco un chico precioso, hermoso, un chico que tenga ojos claros, ni el mejor cuerpo. Busco un chico que me haga sacar una sonrisa, que me muestre su sonrisa, no que me muestre su cara de hijo de puta y me haga lagrimear. Quiero un chico tierno, pero que a la vez sea secote, necesito alguien que me aguante, que me entienda, que sea mi acompañante, no mi "cosa", "mi hijo". Yo no quiero una cosa para decir 'esto es mío, nadie lo toca, nadie se le acerca'; quiero una persona que me haga sentir confiada de que yo soy la única a la que de verdad quiere. Tampoco necesito un hijo a quién cuidar, una persona de la que tenga que estar pendiente de donde anda, con quién, qué hizo, si hizo esto, si hizo aquello. Necesito un compañero de sueños, un compañero de travesuras, de misterios, de risas, de cariño, de amor. Quiero alguien que me haga muecas extrañas cuando lloro, para reír. Alguien para jugar a la guerra de almohadas, que me joda y yo lo joda, que me venga a ver. Quiero salir, disfrutar, no estar encerrada en mi cuarto con él. Quiero vivir la vida con él, disfrutar la vida con él. Y sé que puedo, que no es solamente cosa de cuentos que se puede vivir feliz con alguien. Porque los cuentos te muestran nada más la vista positiva, y sé que hay miles de vistas negativas. Pero siempre se superan, se pasan. Pero claro, con la persona indicada. Tampoco digo que tengamos una media naranja, no. Vuelvo a repetirlo, tenemos otra naranja a nuestro lado, que nos acompaña a rodar.