martes, 22 de enero de 2013

Hay momentos en los que quisiera carraspear las paredes, gritar, sollozar. Otras veces prefiero quedarme en silencio, quieta. Pero la mayor parte del tiempo gusto de reír, de amar, de extrañar, de aprovechar, de querer. Estoy rodeada de gente maravillosa que hace que todos los días aunque sea se me forme una sonrisa en el rostro. Algunas personas son conocidas desde hace años, otros, solamente conocidos desde hace semanas, pero sin embargo los quiero, y extraño todo los días. Es lindo saber que tenés una persona en la que podés confiar, una persona a tu lado, una persona que te ama. Día a día aprecio más a cada una de esas personas; creo que sin ellas mi vida no sería la misma, yo no sería la misma. Por eso pido gracias, a todos y a cada uno de ustedes, por hacerme como soy, por reconstruirme, porque sin ustedes yo no soy nada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario