Extraño esas palabras que solo cuando las decís vos tienen sentido. Odio que estés lejos y no poder abrazarte. Extraño todas las partes de tu cuerpo, incluso las que odiás. Extraño tus abrazos, esos que siempre me protegen. Extraño tus besos, mágicos, dulces, sinceros, tiernos, cálidos, y que a veces vienen acompañados de sonrisas. Extraño tus ojos, esos que cuando reís se te achinan, esos que no pueden esconderme nada. Extraño tu boca, tus dientes, y la sonrisa que juntos hacen; esa sonrisa brillante, grande. Extraño tus manos, grandes y suaves. Extraño todo ese cariño que vos me das cada vez que estamos juntos. Odio que estés lejos y no poder mirarte a los ojos y decirte que te quiero, y que también te amo. Detesto que no estés acá, y que tenga que esperar cuatro días más para poder verte y no soltarte. Me gustaría que estuvieras ahora mismo al lado mío, y a través de tus ojos poder mirar tu interior. Odio que estés lejos, necesitar de tus abrazos y necesitar que estés conmigo.
lunes, 4 de mayo de 2015
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